15 Plantas de interior que crecen en agua

El cultivo de plantas en agua se ha popularizado enormemente en los últimos años, ofreciendo una forma estética y sencilla de incorporar más verde en nuestros espacios interiores sin la necesidad de tierra.

Esta técnica, conocida como hidrocultura, no solo simplifica el mantenimiento de las plantas sino que también actúa como un elemento decorativo vibrante y moderno. Desde plantas que purifican el aire hasta aquellas que añaden un toque de tranquilidad y color, cultivar plantas en agua es una opción fascinante para los entusiastas del jardín interior.

Índice
  1. Las 15 mejores Plantas de interior que crecen en agua
    1. Pothos (Epipremnum aureum)
    2. Filodendro (Philodendron spp.)
    3. Helecho cuerno de alce (Platycerium spp.)
    4. Monstera deliciosa
    5. Tradescantia (Tradescantia spp.)
    6. Planta araña (Chlorophytum comosum)
    7. Bambú de la suerte (Dracaena sanderiana)
    8. Palma areca (Dypsis lutescens)
    9. Cinta (Chlorophytum comosum)
    10. Hiedra inglesa (Hedera helix)
    11. Sábila (Aloe vera)
    12. Fittonia (Fittonia albivenis)
    13. Coleo (Plectranthus scutellarioides)
    14. Impatiens (Impatiens spp.)
    15. Peperomia (Peperomia spp.)

Las 15 mejores Plantas de interior que crecen en agua

Explorar el mundo de las plantas que prosperan en entornos acuáticos es sumergirse en una experiencia única de jardinería. Sin la necesidad de tierra, estas plantas pueden crecer en recipientes llenos de agua, lo cual permite observar no solo sus hojas y flores sino también la belleza de sus raíces.

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Pothos (Epipremnum aureum)

El Pothos, conocido también como potus o planta del dinero, es una de las elecciones más populares para quienes inician en el mundo de la jardinería hidropónica. Esta planta no solo es resistente y adaptable, sino que también posee una belleza sutil y relajante con sus hojas verdes brillantes, a menudo matizadas con amarillo o blanco. Su habilidad para prosperar en una variedad de condiciones de luz, desde sombra parcial hasta luz indirecta brillante, la hace ideal para interiores donde otras plantas podrían no sobrevivir. En agua, el Pothos puede crecer con un mantenimiento mínimo, requiriendo solo cambios de agua periódicos y una alimentación esporádica con nutrientes líquidos. Además, es excelente para purificar el aire, eliminando toxinas como el formaldehído y el xileno, lo que mejora significativamente la calidad del aire interior. Su crecimiento es rápido y puede llegar a formar enredaderas largas y elegantes que añaden un toque de naturaleza a cualquier espacio.

Filodendro (Philodendron spp.)

El Filodendro es ampliamente apreciado por su foliaje exuberante y su forma elegante. Las hojas en forma de corazón, de un verde profundo y brillante, son capaces de aportar un vibrante toque de vida a espacios oscuros, gracias a su notable adaptabilidad a condiciones de baja luz. Cultivar filodendros en agua es sorprendentemente sencillo y efectivo, permitiendo a las raíces extenderse libremente, lo que a menudo resulta en un crecimiento más saludable y robusto. Estas plantas también son conocidas por su capacidad de adaptación a diferentes entornos, lo que las hace perfectas para oficinas o hogares menos iluminados. Además de su atractivo estético, los filodendros ayudan a purificar el aire, haciendo de estos no solo un elemento decorativo, sino también un beneficio saludable para el entorno interior.

Helecho cuerno de alce (Platycerium spp.)

El Helecho cuerno de alce es una planta singular y dramática, ideal para aquellos que buscan un elemento decorativo verdaderamente distintivo. Como epífito, en la naturaleza, crece sobre otras plantas de manera no parasitaria, extrayendo nutrientes del aire y la lluvia. Su adaptación al cultivo en agua es posible manteniendo la base del helecho por encima del nivel del agua para evitar la pudrición. Sus frondas, que se dividen en dos formas, una que recoge nutrientes y otra que realiza la fotosíntesis, crean un espectáculo visual con su textura frondosa y forma peculiar. Este helecho no solo añade un toque dramático a cualquier espacio, sino que también puede ser un punto focal en cualquier arreglo de plantas acuáticas.

Monstera deliciosa

La Monstera deliciosa, con sus icónicas hojas perforadas, ofrece un impacto visual inmediato. Este gigante gentil es perfecto para la hidrocultura, donde sus raíces pueden ser admiradas en toda su gloria a través de recipientes de vidrio. Aunque requiere un poco más de atención que algunas otras plantas acuáticas, como cambios regulares de agua para evitar el estancamiento y la acumulación de algas, los resultados son espectaculares. La Monstera es particularmente efectiva en crear un ambiente tropical y exuberante dentro de casa. Además, sus grandes hojas no solo decoran, sino que también cumplen una función práctica de purificación del aire, haciéndola tanto una opción estética como saludable para el hogar.

Tradescantia (Tradescantia spp.)

La Tradescantia, conocida por su rapidez de crecimiento y sus llamativas hojas variegadas, es una excelente candidata para el cultivo en agua. Sus tallos flexibles y largos con hojas que presentan tonos de verde, púrpura, rosa o blanco, dependiendo de la variedad, caen grácilmente sobre los bordes de jarrones o recipientes, creando un efecto cascada espectacular. Este crecimiento prolífico permite que la Tradescantia se adapte rápidamente a su entorno acuático, donde puede continuar expandiéndose con un mínimo esfuerzo de cuidado. Además de su atractivo estético, es especialmente valorada por su capacidad de adaptarse y prosperar incluso en áreas de luz indirecta baja, lo que la hace ideal para espacios con iluminación limitada.

Planta araña (Chlorophytum comosum)

La Planta araña, o también conocida como cinta, es famosa por su robustez y la elegancia con que sus hojas arqueadas caen en cascada. Cultivada en agua, esta planta no solo es visualmente atractiva sino también extremadamente práctica, pues requiere muy poco mantenimiento. Su resistencia a diferentes condiciones ambientales y la facilidad con que se propaga, permite que rápidamente se convierta en una presencia verde y viva en cualquier hogar. Las raíces blancas y robustas de la Planta araña son fascinantes a la vista cuando están sumergidas en un recipiente de vidrio claro, creando un contraste natural con el verde brillante de sus hojas. Además, esta planta es conocida por su capacidad para purificar el aire, eliminando efectivamente toxinas como el monóxido de carbono y el formaldehído, lo que mejora significativamente la calidad del aire en interiores.

Bambú de la suerte (Dracaena sanderiana)

El Bambú de la suerte, aunque técnicamente una dracaena y no un bambú real, es ampliamente utilizado en prácticas de feng shui para atraer la energía positiva. Su cultivo en agua es notoriamente sencillo, haciendo que sea una opción popular para aquellos que buscan un toque de verde sin complicaciones. Las cañas verdes y rectas, a menudo arregladas en intrincadas formas, crean un punto focal sereno y atractivo en cualquier habitación. Además de su valor estético, el Bambú de la suerte es robusto y puede prosperar en condiciones de baja luz, lo que lo hace ideal para oficinas y hogares con poca luz natural. Cuidarlo implica simplemente cambiar el agua regularmente y asegurarse de que no reciba luz solar directa, lo que podría quemar sus hojas.

Palma areca (Dypsis lutescens)

La Palma areca es tradicionalmente una planta que se cultiva en suelo, pero con los cuidados adecuados, también puede adaptarse a la vida acuática. Esta palma es particularmente apreciada por su capacidad para añadir un toque tropical y exuberante a cualquier espacio. En agua, sus raíces se extienden libremente, lo que puede ser un espectáculo visual impresionante si se mantiene en un recipiente transparente. La Palma areca es conocida por ser una de las mejores plantas para purificar el aire, eliminando toxinas como el xileno y el tolueno. Para mantenerla saludable, es crucial proporcionarle bastante luz indirecta y cambiar el agua regularmente para evitar el estancamiento y la pudrición de las raíces.

Cinta (Chlorophytum comosum)

La Cinta, muy similar en apariencia y cuidado a la Planta araña, es otra planta resistente que prospera en agua. Sus hojas largas y arqueadas, junto con sus márgenes blancos distintivos, hacen de la Cinta una adición decorativa encantadora para cualquier hogar. Esta planta es especialmente valorada por su capacidad para crecer rápidamente y mejorar la calidad del aire interior. En un entorno de agua, las raíces de la Cinta se extienden de manera espectacular, creando un punto focal interesante en recipientes de vidrio. Es una opción excelente para aquellos que desean mantener un ambiente interior sano, ya que es eficaz en la eliminación de impurezas del aire como el formaldehído.

Hiedra inglesa (Hedera helix)

La Hiedra inglesa es ideal para crear un jardín vertical de agua, añadiendo un verde intenso y una rica textura a cualquier espacio. Esta planta trepadora es conocida por su versatilidad y su capacidad para adaptarse a la vida acuática con relativa facilidad. Sus hojas lobuladas y a menudo variegadas se extienden elegante y densamente, proporcionando un telón de fondo verde que también purifica el aire. En agua, la Hiedra inglesa puede crecer robustamente, requiriendo solo una iluminación adecuada y cambios regulares de agua para evitar el crecimiento de algas. Además de su belleza, es muy valorada por su habilidad para absorber toxinas del aire, lo que mejora el ambiente de cualquier habitación.

Sábila (Aloe vera)

La Sábila, comúnmente conocida como Aloe vera, es ampliamente valorada por sus propiedades medicinales, particularmente el gel de sus hojas, que se utiliza para aliviar quemaduras y mejorar la salud de la piel. Aunque no es común verla creciendo en agua, la sábila puede adaptarse a este medio con los cuidados correctos, como asegurarse de que la base de la planta no se sumerja completamente para prevenir la pudrición. En un entorno acuático, la sábila puede ofrecer un aspecto visualmente interesante, con sus hojas gruesas y carnosas extendiéndose hacia fuera desde un recipiente de vidrio. Este método también puede ayudar a observar directamente el desarrollo de las raíces y garantizar la salud general de la planta. Cultivar sábila en agua puede ser un experimento gratificante para aquellos interesados en sus beneficios de purificación del aire y terapéuticos, haciendo de esta planta no solo un componente decorativo, sino también funcional en el hogar.

Fittonia (Fittonia albivenis)

La Fittonia, también conocida como planta nerviosa o planta mosaico, es una elección encantadora para aquellos que buscan añadir un toque dramático de color y textura a su hogar. Originaria de los bosques tropicales de Perú, esta planta se destaca por sus hojas pequeñas y densas, que presentan un distintivo patrón nervado. Las venas de sus hojas pueden ser de colores vivos como el blanco, rosa o rojo, que contrastan espectacularmente con el verde oscuro del follaje, creando un efecto visual impactante.

Cultivar Fittonia en agua es una forma estéticamente atractiva de disfrutar de esta planta, ya que permite a los entusiastas de las plantas observar no solo la belleza de las hojas, sino también el entramado de sus raíces transparentes a través de un recipiente de vidrio. Este método de cultivo también facilita su cuidado, ya que la Fittonia necesita un ambiente húmedo para prosperar, y el agua satisface constantemente esta necesidad sin el riesgo de sobre o sub riego que a menudo ocurre con el cultivo en tierra.

Además de su belleza, la Fittonia es apreciada por su tamaño compacto, lo que la hace ideal para espacios pequeños como escritorios o estanterías. Aunque prefiere la luz indirecta brillante, puede adaptarse a niveles más bajos de luz, lo que la convierte en una opción versátil para diferentes áreas del hogar. Su cuidado involucra simplemente mantener el nivel de agua adecuado y proporcionarle nutrientes líquidos ocasionalmente para apoyar su crecimiento y mantener el vibrante color de sus hojas.

Coleo (Plectranthus scutellarioides)

El Coleo es conocido por sus hojas intensamente coloridas, que varían en tonos desde el verde brillante hasta el rojo profundo, el púrpura y el rosa. Esta planta es ideal para ambientes acuáticos debido a su baja necesidad de luz y su capacidad para prosperar en condiciones de humedad alta. En agua, el coleo puede exhibir un crecimiento robusto y colorido, lo que lo hace especialmente atractivo para aquellos que desean añadir un toque de color a sus espacios sin la complicación de la tierra. Es también una opción popular para aquellos que buscan crear un impacto visual con poco mantenimiento, ya que sus hojas variegadas y brillantes son extraordinariamente decorativas y pueden complementar cualquier estilo de interior.

Impatiens (Impatiens spp.)

Las Impatiens son conocidas por su capacidad para florecer en condiciones de luz baja a moderada, y pueden crecer en agua con la base de sus tallos sumergidos. Este método no solo facilita el mantenimiento, sino que también permite a las brillantes y coloridas flores de las impatiens destacarse en recipientes transparentes. Las impatiens añaden un vibrante despliegue de color con sus flores que pueden variar de rosa a rojo, blanco y morado, ofreciendo un contraste encantador contra el verde de sus hojas. Esta configuración no solo es estéticamente placentera, sino que también permite un control fácil sobre el crecimiento y la salud de la planta, asegurando una floración abundante y prolongada.

Peperomia (Peperomia spp.)

La Peperomia es una planta versátil que ofrece una amplia gama de texturas y colores en sus hojas, lo que la convierte en una candidata ideal para la hidrocultura. Con variedades que presentan hojas gruesas, carnosas, y a menudo con patrones de mosaico o colores brillantes, la peperomia puede adaptarse bien a la vida en agua. Esta planta es particularmente apreciada por su tamaño compacto y su crecimiento lento, lo que la hace perfecta para espacios pequeños o como planta de mesa. En un entorno acuático, la peperomia no solo es fácil de cuidar, sino que también contribuye a un ambiente interior más limpio y fresco, filtrando impurezas del aire y añadiendo un toque de naturaleza tranquila a cualquier habitación.

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